A muchos nos sorprende que los participantes del mercado financiero siempre estén preocupados por lo que pueda decir su máximo representante, ya sea su presidente, primer ministro o inclusive monarca, sea el país que sea. En muchas de estas ocasiones, el mercado puede moverse significativamente, a pesar de que parezca que las declaraciones no tienen ninguna relación directa con la situación económica y/o financiera del país. ¿Por qué? ¿Es posible encontrar alguna explicación?

Por sorprendente que parezca, la reacción del mercado no es una reacción exagerada, ya que los comentarios del líder de una nación siempre tienen implicaciones muy importantes. La mayor parte de las veces, estas declaraciones no tienen una consecuencia inmediata sobre la economía, pero casi siempre conllevan cambios que pueden afectar a su desempeño futuro. Aquí radica su verdadera relevancia. Recordemos que los mercados financieros están en movimiento continuo, ajustando expectativas hacia adelante con la intención de descontarlas a valor presente y encontrar el valor justo de mercado para una multitud de activos financieros.

A manera de ejemplo, veamos algunos tipos de declaraciones que tienen impactos directos importantes sobre el mercado:

1. Proyectos de Infraestructura. Las infraestructuras de un país son, en muchos sentidos, su carta de presentación para atraer inversiones. Entre más modernas sean, mejores serán las condiciones de operación de las empresas (agua, energía), su interacción con proveedores y clientes y la transportación de los bienes que producen a su destino final (carreteras, aeropuertos).

2. Reformas en Telecomunicaciones. Actualmente, las telecomunicaciones son indispensables en la vida diaria de las personas y de las empresas. Contar con una infraestructura de telecomunicaciones de clase mundial es fundamental para que un país siga siendo competitivo y para atraer cada vez más inversión privada, generadora de trabajo y crecimiento.

3. Finanzas Públicas. La estabilidad en las finanzas públicas es muy valorada por los mercados financieros, porque permite a las empresas y a las personas planear en un entorno macroeconómico estable, con certidumbre y sin sobresaltos respecto a la situación financiera del país.

4. Leyes Fiscales. Cualquier cambio impositivo en las leyes correspondientes tiene un impacto directo sobre las empresas, ya que puede afectar a su nivel de utilidades y, por lo tanto, sus recursos disponibles para la inversión. También puede tener consecuencias sobre los ingresos de la población, lo que repercute en su nivel de consumo, mismo que afecta al crecimiento nacional.

5. Seguridad. Un país comprometido con el estado de derecho y que ofrece seguridad a sus habitantes y compañías atrae mayor inversión, porque se puede planear a futuro, contando con la certeza de que las condiciones respecto a la propiedad privada y al bienestar elemental de los ciudadanos están garantizados.

Parece increíble, ¿verdad? Ahora ya sabemos por qué lo que dice el presidente sí importa en los mercados, que siempre buscan ponerle precio hoy a los instrumentos financieros tomando en cuenta lo que estiman que puede pasar mañana.

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