El Bitcoin ha llegado para revolucionar el comercio electrónico o, al menos, para levantar un intenso debate global. ¿Es la moneda libre de bancos centrales que financiará la free internet? ¿Es una amenaza seria para las economías mundiales? ¿El Bitcoin es chido o no?

Algunos señalan que Bitcoin sacará del mapa a los bancos que, con sus decisiones especulativas, han sido los responsables de la crisis mundial. Otros dicen que es una amenaza, y muy seria, para la economía global.

El Bitcoin se compra con dinero real, no tiene ningún tipo de regulación, y solo viaja por internet en una red P2P. Tú puedes comprar Bitcoins con tu moneda nacional (el Bitcoin trabaja con más de 30 divisas), transferirlos a un amigo en París, y él los puede convertir en euros son ninguna comisión. La transferencia es anónima, imposible de rastrear, y cada vez es más popular (Wikileaks, Reddit o WordPress, entre otras, ya los han adoptado para recibir donativos). No hay intermediarios (bancos, PayPal, VISA, etc): Bitcoin es una moneda, y es un banco.

Algunos pequeños comerciantes con operaciones internacionales lo usan porque para ellos es más seguro que la tarjeta de crédito. Si tú eres un fabricante de guitarras de lujo en Wichita, y vendes diez guitarras por 100,000 dólares a un desconocido en La India, nadie te asegura que la tarjeta que ha empleado el tipo de La India no sea clonada, y VISA o Mastercard responden por los dueños legítimos de la tarjeta, no por el fabricante de las guitarras que perdió su mercancía.

El gran problema es que el valor de los Bitcoins fluctúa (y mucho), ya que no está respaldada por ningún bien y su valor se mueve en función de la oferta y la demanda de los usuarios. A mediados de abril de este año, el Bitcoin se disparó y pasó a valer 266 dólares, para luego caer a solo 64, en solo dos días. Algunos señalaron a inversores rusos huyendo de la crisis financiera de Chipre. Otros dicen que fueron inversionistas estadounidenses que hicieron ventas en corto (o sea, que especularon con el alto precio de los Bitcoins). Además, por diseño, nunca hay más de 21 millones de Bitcoins en circulación, lo que refuerza la fluctuación salvaje de la moneda virtual y hasta esquemas de Ponzi (si te suena un tipo llamado Madoff ya sabes de qué estamos hablando). Asimismo, al ser un código abierto, la seguridad no está garantizada. En 2011, un ataque hacker hizo que el valor del Bitcoin cayera de 17.50 dólares a solo unos centavos.

El caso es que las autoridades estadounidenses ya no aguantan más. Consideran que el Bitcoin puede ser un peligro potencial para la economía mundial, y han intervenido dos cuentas del mayor operador de Bitcoins, la japonesa Mt. Gox, por considerar que «ejerce un negocio de servicios monetarios sin licencia». En Europa la cuestión ya está en el Parlamento Europeo.

P.S.: En la película «Premium Rush», Joseph Gordon-Levitt es un mensajero en bici que se juega la dentadura en las calles de NY para llevar a tiempo sus envíos. Un día le encargan llevar un misterioso boleto con una clave, sin saber que su vida corre peligro. En la peli nos cuentan cómo las mafias utilizan un sistema de envío de fondos llamado «hawala» para transferir grandes cantidades de dinero sin que se enteren los bancos centrales. En general se emplea este sistema ilegal para transferencias internacionales, con «mulas» como las que pasan drogas escondidas para el narcotráfico, pero esta vez es lana. El hawala es potencialmente peligroso para las economías de los países, pues se realizan transferencias de remesas sin que los bancos centrales lo sepan y, por tanto, no se producen cambios oficiales en los activos y pasivos de los países. Además, como estas transferencias no pagan impuestos, a los bancos centrales les duele todavía más. Es común que el hawala sea el vehículo típico para el lavado de dinero, el narcotráfico y el terrorismo internacional. Según el Fondo Monetario Internacional, el hawala mueve miles de millones de dólares cada año.

¿Es Bitcoin el hawala digital? 

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