¿Dónde está más seguro mi dinero?
¿Cómo funciona una casa de bolsa?
Si somos clientes de una casa de bolsa, le mandamos nuestro dinero y, de manera inmediata, lo deposita en nuestra cuenta de inversión. Si para poco después de la 1:00pm no hemos tomado alguna decisión de inversión con el dinero cuando el mercado financiero está todavía abierto, para que no duerma ocioso y gane una rentabilidad, la casa de bolsa lo invierte de manera automática a nuestro nombre en un fondo de muy bajo riesgo con deuda gubernamental y con liquidez diaria, es decir podemos sacar el dinero en cualquier momento, y así lo hace sucesivamente todos los días, hasta que decidamos invertir en algún instrumento financiero en particular. Una vez que esto pasa, nos convertimos en dueños de acciones de un fondo. Por supuesto que en cualquier momento podemos decidir invertirlo en otras opciones, pero el resultado es el mismo: somos dueños de lo que compremos.
Si la casa de bolsa llegara a tener un problema de viabilidad, seguiríamos siendo dueños de las inversiones que tengamos, dado que las compramos nosotros directamente. En este escenario, podemos solicitar la transferencia de nuestras inversiones a otra casa de bolsa. No existe un seguro para nuestras inversiones, pero la realidad es que al tomar nuestras propias decisiones de inversión y comprar los instrumentos financieros directamente, la propiedad es nuestra, no necesitamos un seguro.
¿Cómo funciona un banco?
Si somos clientes de un banco, depositamos nuestro dinero en una cuenta de ahorro o de cheques y, dependiendo de la cuenta, puede o no ganar dinero. Las cuentas de cheques generalmente no nos pagan ningún rendimiento a las personas físicas y las de ahorro, cuando pagan, suelen tener tasas de interés muy bajas.
A diferencia de la casa de bolsa, donde decidimos exactamente en qué queremos poner nuestro dinero a trabajar, nosotros no decidimos ni le instruimos al banco qué hacer con nuestro dinero. Un banco toma los depósitos y ahorros de sus clientes y decide a quién prestarlos. El banco típicamente le presta a gobiernos, empresas y personas físicas (hipotecas, tarjetas de crédito, etc.).
Si el banco tiene un problema de viabilidad o quiebra, nos tenemos que formar en la fila de acreedores para recuperar nuestro dinero, que saldrá de los créditos que haya dado el banco y pueda recuperar… no necesariamente en un día sino en el tiempo. Este escenario nos puede llevar a perder una parte o la totalidad de nuestros ahorros. Por ello, como no somos dueños directos de los instrumentos financieros como en la casa de bolsa, para protegernos, existe un seguro en todos los bancos del país administrado por el Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB) que nos protege a cada uno por hasta 400 mil UDIs (al día de hoy un poco más de 3 millones de pesos) en cada banco.
La gran diferencia entre la casa de bolsa y el banco es quién tiene la propiedad de las inversiones que se hagan con nuestro dinero. En la casa de bolsa nosotros directamente, y en el banco, el banco. Precisamente por esta razón, en el caso de los bancos, se creó el seguro que no es necesario en las casas de bolsa.
En conclusión, es muy seguro tener nuestro dinero e inversiones en una casa de bolsa o un banco, cuando tenemos hasta 400 mil UDIs: en la casa de bolsa porque somos dueños directamente de las inversiones y en el banco porque a pesar de no ser los dueños directos, contamos con un seguro para protegernos.
Para las personas que tienen más de 400 mil UDIs, una casa de bolsa les ofrece seguridad plena por la propiedad de las inversiones, pero tienen que ser mucho más cautelosas en la elección de su banco, porque la calidad crediticia del banco se vuelve muy relevante para ellas si el seguro no es suficiente para devolverles su dinero.
Eso sí, cuando hablamos de inversiones, sin duda tenemos una mucha mayor oferta de posibilidades de inversión y poder de decisión sobre nuestro dinero en una casa de bolsa que en un banco, así que si queremos poner nuestro dinero en acción, las casas de bolsa representan una mejor opción.